Blácula (Blacula)
Año:1972
Duración: 93 min.
Género: Terror, Blaxplotation
Director: William Crain
Actores: William Marshall, Vonetta McGee, Denise Nicholas, Thalmus Rasulala, etc.
Más datos en la IMDB
Minisinopsis: Unos decoradores de interior de Los Ángeles compran las posesiones del castillo de Drácula. Entre las posesiones se encuentra el ataúd donde descansa un príncipe africano que fue mordido por Drácula siglos antes.
Si ya has visto la película, puedes seguir leyendo.
En cuanto a la dirección y la técnica de la película, no hay mucho que decir, salvo que es correcta. Fue la segunda película de William Crain, que tampoco se prodigó demasiado después de hacer Blácula pero que era un director correcto, sin más. En general, técnicamente es una pieza media para la época de la productora MGM, ni mala ni buena, correcta.
Bueno, William Marshall no es que tenga una interpretación excepcional que digamos, pero es que nadie ha dicho que sea fácil interpretar a Drácula, digo Blácula.
Y – esto es una impresión mía – cuando Thalmus Rasulala sonríe me dan ganas de decir «¡CUÑAAAAAO!»
En cuanto al guión ya es otra cosa. Veamos ejemplos:
La película ya despunta cuando Blácula dice que es el príncipe de una tribu de guerreros del nordeste del delta del Níger y que ha sido enviado a Europa para acabar con el tráfico de esclavos. Con lo que me surjen varias preguntas:
A) ¿Qué diablos hace en Rumanía si Rumanía no traficaba con esclavos? (Al menos, que yo sepa)
B) ¿Dónde ha aprendido a hablar rumano?
C) ¿Qué hace el príncipe de una tribu africana de 1780 disfrazado de príncipe de un país Europeo de 1900?
En realidad no es un fallo -ahora me explico-, pero los comentarios racistas campan por toda la película y chocan mucho, la verdad. No es un fallo, digo, porque el 1970 los afros estaban en plena lucha por sus derechos civiles en EEUU. La cuestión es, ¿por qué iba a ser Drácula un racista si vive en Rumanía? Que lo sean los policías, me parece más o menos normal, ¿pero Drácula, que sólo ve el rojo de la sangre?
Se supone que Blácula lleva dos siglos en su ataúd y, al salir, no le ha crecido el pelo. Esto ya es algo típico de las pelis de vampiros; es como si tuviesen un espejo, unas tijeras y una maquinilla de afeitar en su ataúd. Podríamos suponer que a los vampiros no les crece el pelo, pero es que hay miles de vampiros con el pelo largo en las películas. Bien pensado, sería absurdo que un vampiro tuviese un espejo en el ataúd porque no podría usarlo, acabaría cortándose una oreja intentando cortarse el pelo porque no se vería reflejado en él. Con lo que sólo me queda la opción de que los vampiros vayan al peluquero, que será vampiro, supongo, por aquello de que no se asuste cuando no les vea reflejados en los espejos.
Otra de las tonterías del guión es meter a un tío que viene de una tribu africana de 1780 en Los Ángeles, en 1970 y que no se acojone, literalmente. Además, vale que hable rumano porque sabía que iba a ir a hablar con el Conde Drácula aún no sé por qué, pero ¿de dónde ha sacado su inglés? ¿Tenía una guía de conversación junto a la maquinilla en el ataúd?
Hay una secuencia en la que Blácula está sentado con tres más en un club y aparece una tía que le saca unas fotos. Poco después, Blácula se va del club y persigue a la fotógrafa hasta su casa, donde acaba con ella. ¿Cómo sabía Blácula que no iba a salir en las fotos si no le habían hecho ninguna?
Con otro de los personajes con los que se encuentra en el club, con Skillet, hay una relación curiosa de rechazo sin explicación alguna. Cada vez que se lo encuentra se tiene que ir corriendo. ¿Será porque le llama «hermano»?
La historia con Tina, su amada, aunque se supone que es la continuación de la historia de amor entre Mamuwalde y Luva, es chirriantemente ñoña.
En la última parte de la peli, cuando la policía va a asaltar el almacén donde se supone que está Blácula, lo hacen de noche. Es absurdo, toda la peli siguiendo las historias de vampiros al dedillo y luego cometen un fallo tan tonto. Oh, lo bueno de aquí es cuando cogen las lámparas de aceite que se encienden solas al estallarse contra el suelo, ¡fuego expontáneo, genial!
Vamos con lo visual:
Lo más grande son los maquillajes de los vampiros. Son verdes… bueno, los vampiros blancos son verdes, los afros son medio verdes o grises y son más cutres casi que los de «Kung-Fu contra los siete vampiros de oro«. En lugar de parecer vampiros, parece que se les han caducado.
Oh, y dentro del tema maquillaje, cuando Blácula se transforma ¡es genial!, se le cardan hasta las cejas y las patillas. Claro que, si se le carda todo, ¿cómo tendrá el pelo de abajo, que ya viene cardado de serie?
Los decorados de Transilvania son la bomba. El exterior del castillo de Drácula parece más una granja y las paredes se nota que son de poliuretano o cartón piedra.
Otro efecto cutre-grandioso es el del garfio del tipo de la morgue, Sam. Se nota a la legua que lo tiene agarrado. ¿Qué necesidad había de ponerle un garfio?
¿Y qué decir del dibujo que hace el Dr. Thomas del vampiro? Expléndido.
Aún con todo esto, la película tiene cinco razones por las que creo que nadie debería perdérsela: La primera es la brutalidad plástica de ver a un drácula negro, magnífico. La segunda serían los títulos de crédito animados, que son fabulosos; me recuerdan al juego Locoroco para PSP. La tercera es la escena en la que Blácula corre con su capa por las calles de Los Ángeles persiguiendo a Tina con la música supersetentona de fondo. La cuarta sería la inclusión de tres números del grupo Hues Corporation, que sacaron cinco discos con la RCA y la Warner después de aparecer en esta peli, y los bailes que se marcan. Y la quinta es una frase que dice Blácula en el club: «Tráigame un Bloody Mary» ¡Qué cachondo, el tio!
Creo que habrìa que ser un poco mas benevolo con la pelicula y situarla en el contexto histórico de los EEUU. La Banda Sonora me gustó mucho, Funk con detallitos siniestros.
¿Más benévolo? Le he puesto un 5 en interés, hombre. No por criticar los efectos y los errores del guión quiero descalificar la película.
Lo primero felicitarte por tu blog, el cual he conocido por un comentario tuyo en el blog «cine de los 80».
He echado un vistazo a todas las peliculas que comentas, pero es que no habia visto ni una hasta llegar a esta, la verdad es que Blacula la vi cuando tenia más o menos 5 o 6 años, una noche que la dieron por la tele y a escondidas claro. Con los años la sigo recordando y no la he vuelto a ver, pero la recuerdo porque supongo que con esos años no te fijas en si es buena o mala, la ves y ya está,Y a mi me dio mucho miedo, las persecuciones y ver al Dracula negro sediento de sangre….No creo que la vuelva a ver ya que prefiero recordarla como esa peli que vi de pequeña casi como una hazaña.
Buenas,
Recientemente he descubierto tu blog a traves de loquemerevientadejapon. Como Nacho, yo soy un español currando y viviendo en Japon.
Recuerdo que yo tambien vi Blacula cuando era un niño por la noche, asi que seguramente el mismo dia que Lucy Liu. Sin embargo, yo si me atrevi a verla otra vez, y he de decir que me gusto mucho mas (en el cutresentido, claro ;) ) Y es que me parti de risa cuando la vi!
Pero, curiosamente, al igual que Harryhausen, me encanto la banda sonora. Tanto que cuando estaba en España la descargue (ejem) y la escuchaba todo el rato :D Genial!!!! Vaya, ahora la voy a tener que descargar otra vez…
Por cierto, si no lo conoces, deberias echarle un vistazo a este tipo: Cuneyt Arkin. Es una autentica joya de actor.
Bueno, voy a leer el post sobre Grita, Blacula, Grita!
Sigo este tipo de peliculas y me alegro que ya empiezan a sacar en Dvd este tipo de peliculas la pelicula que me gustaria reivindicar es «Hitman» protagonizada por el ex jugador de futbol americano Bernie Casey y Pam Grier ,esta pelicula es un Reamake de el Thriller britanico «Get Carter ,Asesino Implacable» y esta producido por Gene Corman ,hermano de Roger.